Por Alejandro Alegría Torres, enviado especial a Pelarco.

Los jinetes Rufino Hernández y Nicolás Sepúlveda (Asociación Talca Oriente) llevaron al Criadero Manantiales de Pelarco a lo más alto del Clasificatorio Centro de Pelarco con una actuación notable, impulsados por una poderosa barra y complementándose en las quinchas como maestro y discípulo que son. Un triunfo bastante emotivo, que estuvo marcado por bellas carreras realizadas en el primer y cuarto animal.

Hernández, quien conquistó su octavo triunfo en selectivos, y Sepúlveda, quien por primera vez participó de la Serie de Campeones de un clasificatorio, estuvieron sólidos corriendo a las yeguas Ahora Sí (N°216717) y Negra Linda (N°223138), pese a que se unieron para correr en los últimos dos rodeos de la Temporada Grande para correr esta collera y cosecharon notables 35 puntos buenos (parciales de 12+7+4+12). Es que Sepúlveda de los nueve años que fue "apadrinado" por el dos veces campeón de Chile y esa cercanía en la cancha se notó.

Agradecimientos para el alcalde y su enorme labor

La Serie de Campeones de Pelarco comenzó a puntualmente a las 15:30 horas, cuando ingresaron los capaces Alberto Herrera, Alberto Vargas y Jorge Zúñiga, socios del Club Maule-Duao, y luego lo hicieron las 27 colleras que premiaron en la Medialuna "Bonifacio Correa Echenique" para el 74° Campeonato Nacional de Rodeo.

El maestro de ceremonia fue el comunicador Alonso Olave, quien en seguida dio la bienvenida a la Banda Instrumental del Regimiento de Talca, a los dirigentes de la asociación histórica, al alcalde Bernardo Vásquez Bobadilla y agradeció la presencia de los directores de la Federación del Rodeo Chileno: Francisco, Infante, Iván Acevedo, José Manuel Pozo, Alfredo Moreno, José Tomás García e Ives Richasse.

El Himno Nacional fue interpretado por la Banda Instrumental y coreado por el público que repletó el recinto pelarquino. Mientras que el izamiento de la bandera chilena fue efectuado por Eugenio Cepeda Mandiola, presidente de la Asociación Talca, y el alcalde Bernardo Vásquez.

Cepeda fue el primero en realizar un discurso, diciendo: "Estamos llegando el término de este desafío que nos pusimos hace seis meses atrás. Fue un arduo trabajo y esperamos que se hayan sentido acogidos, hicimos lo posible para tener comodidades para los corredores, dirigentes y el público. Se invitaron a destacadas personas que viven del rodeo y se nombró en la Serie Potros a 'antiguos amigos del rodeo'. Lo bonito de esto es ver como distintas generaciones de rodeo se unen, es el ejemplo de José Francisco Hernández que con sus 12 años clasifica al Campeonato Nacional de Rodeo".

Luego que se realizara un aplauso a los periodistas y comunicadores que desde distintas partes del país informaron del evento, la Asociación Talca entregó un presente al alcalde de Pelarco por su enorme aporte en la realización del Clasificatorio y su fuerte compromiso con el rodeo chileno.

Vásquez agradeció la distinción diciendo: "Durante los días del evento nos hemos sentido orgulloso de que cada persona que se nos acerca nos dice, que lindo este recinto, que bueno defender nuestras tradiciones con este Clasificatorio. La verdad es que las tradiciones hoy día no solamente se defienden con el rodeo chileno. Yo los invito a defender las tradiciones también, a defender nuestro campo chileno, que lamentablemente está viviendo la peor crisis en los últimos 20 años".

"El campo chileno está desapareciendo, se están construyendo viviendas en vez de tener pasto para los animales o tener los alimentos que consumen todos los chilenos. Nuestras tradiciones no van solo con el rodeo chileno, sino con todo el campo chileno y brindar todo el apoyo a las comunas rurales que hacen un tremendo esfuerzo por sacar adelante a nuestro país", agregó.

Uno de los momentos más emotivos que se vivió en Pelarco fue el Novillo del Silencio, el cual fue acompañado por la cantora Claudia Bravo con su canción "Arreando Piños de Estrellas", y corrido por los hermanos Gastón y Pedro Javier Salazar Ruiz en honor a todos los socios de la Zona Centro fallecidos en la última temporada, entre ellos Gastón Salazar Correa y Paulo Reyes Vergara.

Mientras que el Sello de Raza fue jurado por Jesús Pons, acompañado por el gerente técnico de la Federación Criadores de Caballos Raza Chilena, Gabriel Varela, quienes escogieron a la yegua San Manuel de la Punta Mi Negra (N° 222239, Fichero y Esa Negra), montada por Manuel Ignacio Mallea, la cual recibió el mismo honor la temporada anterior en el Champion de Chile y que presentó medidas de 1,37 metros, 1,68 metros de cincha y 18 centímetros de caña.

¡Vamos Corriendo!

Las expectativas del público se encendieron cuando el secretario Eduardo Arellano expresó el característico "¡Vamos corriendo!" y comenzó el champion que fue jurado por Marcelo Monsalve, Raúl Florín y Cristián Enríquez. En el primer animal la mejor carrera fue realizada por Rufino Hernández y Nicolás Sepúlveda, con este último marcando ocho a la mano y partiendo con 12 puntos buenos. También destacaron las carreras de 11 concretadas por Pedro Angel Urrutia e Iñaki Gazmuri (Cauquenes) en Llahuecuy Muñeco y Lomas de Cardal Ñilque, y el Criadero Doña Dominga C.S. con Luis Huenchul y Felipe Undurraga (Colchagua) en Farsante y Tintoreado.

Al segundo animal accedieron 19 colleras de dos puntos buenos hacia arriba, repitiendo lo que se vivió en Villarrica, en donde también el primer corte de la Serie de Campeones fue bajo (En el Sur fue de un punto bueno). Ahí Leonardo Espinoza y Julio Reyes (El Libertador) se situaron como líderes, luego de una carrera de 11 buenos en  Casas de Colchagua Pintoso y Vista Volcán Tiro Al Aire. Un punto más abajo quedó Manantiales de Pelarco luego de sumar siete en el segundo huacho. Y también se metieron en la disputa el Criadero San Manuel de la Punta con Manuel Mallea y Gabriel González (O'Higgins) en Mi Negra y Qué Negra con 17 (8+9), y el Criadero Santa Graciela de La Capellanía con Cristián Leiva y Jorge Gutiérrez (Valle Santa Cruz) en Indignado y Margarita con 16 (7+9).

Al tercer toro avanzaron 13 parejas de nueve buenos o más. Ahí Espinoza y Reyes se consolidaron sumando siete y trepando a 27. Mientras que la carrera más linda fue del Criadero Las Coscojas con Juan Ignacio Meza y Patricio de la Barra (Aguanegra) en El Pancho y Sabático II, quienes sumaron 12, pero como habían pasado el corte con lo justo, llegaron a 21. Por su parte, Santa Graciela de La Capellanía y Manantiales de Pelarco quedaron expectantes con 23 grandes, luego de carreras de siete y cuatro, respectivamente.

La "garra" de Rufino y Sepúlveda

El cuarto animal fue corrido por siete colleras de 19 puntos buenos o más. Los primeros en correr fueron Cristián Leiva y "Pelado" Gutiérrez, quienes dejaron a Santa Graciela de La Capellanía con 32 puntos luego de una carrera de nueve. Esa suma les alcanzó para asegurar el segundo lugar del selectivo.

Luego la medialuna se vino abajo. Rufino Hernández fue a la mano e hizo la primera del ijar, Sepúlveda no se achicó y concretó otra grandota para atrás, y el dos veces Campeón de Chile aseguró con una de medio, cosechando 12 grandotes para Manantiales de Pelarco y llegando a 35 en Ahora Sí y Negra Linda. Un puntaje que solamente podían superar Espinoza y Reyes.

Y precisamente corrieron a continuación los representantes de El Libertador. Sin embargo, la presión fue mucha para Julio Reyes, de 18 años y que corrió por primera vez un selectivo, pasando a piño en el primer intento. Leonardo Espinoza, que fue el más atajador de la Serie de Campeones no destiñó y marcó tres para atrás. Mientras que el joven jinete no pudo sumar en el su último viaje. Cerraron con una carrera de dos, que les hizo llegara a 29 y adjudicarse un merecido tercer lugar.

Ahí la barra local se volvió loca aplaudiendo a los campeones y Rufino con "Nico" se fundieron en un emocionante abrazo en el centro de la medialuna. Para las estadísticas quedaron las carreras de los otros corrales que vinieron después, en donde Las Coscojas terminó con 22, San Manuel de la Punta con 23, José Astaburuaga y José María Martínez (Ñuble) en Honrado y Relajado llegaron a 25, y Urrutia con Gazmuri a 23.

Un triunfo de jinetes talquinos, aunque de la asociación vecina, que fue celebrado por la afición que llegó a Pelarco y que les aseguró a Hernández y Sepúlveda correr la Final del 74° Campeonato Nacional de Rodeo. Pero que será recordado por ser el octavo título en Clasificatorios de Rufino, el primero de su discípulo Nicolás. Además, un selectivo que tuvo el sello familiar de los Hernández, ya que en el también sobresalió José Francisco, el hijo del bicampeón nacional, que se transformó en el jinete más joven en la historia en llegar a Rancagua... De esas historias que nunca se pararán de contar.