Las reacciones de cariño y respeto en memoria del fallecido presidente honorario de  la Federación de Criadores de Caballos Chilenos y dueño del Criadero Santa Isabel, Agustín Edwards Eastman, siguieron alzándose.

Es el caso de los actuales directivos de la agrupación, Jorge Cañas y Abel Bravo, quienes en diálogo con Caballoyrodeo.cl, comentaron la labor de Edwards, su legado y la responsabilidad que tienen como dirigentes en la continuidad de lo realizado por quien fuera presidente de los Criadores entre 1988 y 2013.

Cañas comentó sus sensaciones: "La verdad es que veo a don Agustín como una figura emblemática, con tantos años en la Federación. En los últimos 10 años me tocó compartir con él en diferentes instancias, siendo yo presidente de Asociación, y luego como parte del Directorio, y puedo decir que fue un hombre muy cercano, muy preocupado de todo lo que estuviésemos haciendo como Directorio. Le gustaba estar al tanto de todo", dijo.

"Para el Caballo Chileno y para la Chilenidad y las tradiciones, su aporte es incalculable, y solo con el pasar de los años nos vamos a dar cuenta de lo que realmente es. Ya vemos la Semana de la Chilenidad como ha prendido, no solo en Santiago, también en otras ciudades de provincia. Esa es una idea de él, es el principal gestor, y su aporte como criador es extraordinario a partir de lo que hizo en Santa Isabel, y la verdad es que fue una persona que le daba mucha importancia al tema de las tradiciones, a los que nos da la identidad a nosotros como chilenos", añadió.

"Él tenía una frase muy propia y decía que 'hay que traer el campo a la ciudad'. Él hasta último tiempo estuvo preocupado de los jóvenes y sobre todo de los niños, porque decía que nunca han visto una gallina, decía que no conocen los animales de campo, y eso es muy valioso, porque acercó las tradiciones a la ciudad. Lo otro es la defensa del Caballo Chileno, porque todos los criadores, de alguna manera, tenemos las sangres que él tuvo. Son siete campeonatos y eso nadie lo ha logrado. Creo que en todo aspecto fue un aporte gracias a su espíritu, a su cariño por lo nuestro apegado a defender nuestras tradiciones", finalizó.

Abel Bravo: Para preservar su legado es preciso actuar con diligencia en la preservación de las tradiciones

Abel Bravo, en tanto, también destacó el trabajo realizado por Edwards en su labor de criador y dirigente: "A mi juicio el gran legado que nos ha dejado don Agustín es su reconocida veneración por las tradiciones nacionales, especialmente aquellas vinculadas a la vida y costumbres del campo. En su opinión, ello es el principal elemento que da identidad a nuestro pueblo. Compartí plenamente su apreciación pues la historia social y la idiosincrasia nacional se forman a partir de las costumbres y éstas generan las tradiciones", dijo.

"Respecto a la crianza, su pasión por el caballo chileno lo llevó a aplicar recursos, tiempo y dedicación, en la formación de un criadero que es ejemplo para todos  y símbolo del éxito, lo que se demuestra en la calidad de sus productos y  los muchos premios alcanzados. Para ello supo rodearse de personas con experiencia, con conocimientos y de gran lealtad. El Criadero Santa Isabel y todos sus integrantes pueden estar muy tranquilos pues le dieron todas las satisfacciones posibles, ya que los colores de sus chamantos lucieron en exposiciones y en rodeos", añadió.

Explicó que personalmente aprendió mucho de Edwards: "Me deja una sensación muy grata pues pude compartir con él muchas actividades y, en su enorme mayoría, coincidiendo en  posiciones que estimamos tendientes a preservar mejor los fines de nuestra Federación. Pude trabajar con un hombre multifacético, capaz de dejar sus altas responsabilidades empresariales por su pasión a lo nuestro; capaz de dejar sus altas vinculaciones por dedicarse a nosotros; capaz de disfrutar intensamente de cada Consejo Anual y de compartir con cada uno de los asistentes. Más allá de su rostro aparentemente adusto lo ví reír, aplaudir y celebrar, haciendo honor al estilo que caracteriza a los criadores. Y, por sobre todo, destaco su sencillez pues siempre tuvo la virtud de hacer desparecer cualquier diferencia. En suma, un dirigente notable que supo brindar su impronta de amistad en el desempeño de sus altos cargos en la Federación", recordó.

El dirigente también miró a futuro: "Para preservar el legado de don Agustín es preciso actuar con diligencia en la preservación de las tradiciones, costumbres y actividades de nuestro campo, difundiéndolas y respetándolas como valores propios, evitando que la creciente globalización llegue a  afectar a nuestra identidad. Luego, consolidar a nuestro caballo como fiel exponente de una raza que, forjada en nuestras tierras, ha de mantenerse genéticamente pura, con registros genealógicos que así lo garanticen y para trabajo, recreación y deportes genuinamente chilenos", indicó.

"Finalmente, la Semana de la Chilenidad deberá ser testimonio permanente de sus afanes, donde su caminar lento y conversación pausada entre folklore, entretenimientos y artesanía, se mantendrá en el recuerdo de quienes compartimos con él una pasión y un sentimiento de nacionalidad. Ese es mi compromiso por convicción personal y en recuerdo de nuestro Presidente Honorario", cerró.